No sé si os acordáis de que en mi primer post hice la declaración de intenciones de hablar en este blog de «Belleza, bienestar y estilo de vida» , bueno también lo pone en la cabecera, y oye, al final, voy a tener que poner la categoría de belleza al final. Me pongo a escribir y casi nunca me viene nada por «belleza» y acabo hablando de bienestar y estilo de vida; será porque en el fondo pienso que es mucho más importante SENTIRSE Estupenda! que intentar ESTAR Estupenda! Eso sí, algunos truquitos como los de las toallitas, las pestañas,…también nos ayudan a sentirnos Estupendas!
Así que he decidido que hoy, aprovechando que esta semana ha hecho 3 años de mi mastectomía, voy a contaros lo que ha cambiado mi vida en esta categoría que ¡¡¡también tiene mi blog!!!
Aquí va, Belleza «EL ANTES Y EL DESPUÉS»
Os cuento todos mis cambios estéticos en estos tres años…
Es la parte más visible de los tratamientos del cáncer pero también la menos importante porque casi todo vuelve y lo que no vuelve, después de lo que pasamos y hemos pasado, lo asumes o lo relativizas.
Todas las que me conocéis sabéis que he sido siempre un poco histérica con los engordes, sin hacer daño a nadie ni ninguna barbaridad, yo a lo mío, alimentándome fenomenal, pero pendiente.
Y en eso no he cambiado mucho pero los dos kilos de más entre «el antes y el después», los he asumido con deportividad (+ o -) y me niego a privarme del disfrute de tomar una cervecita con amigos, la bomba de chocolate de mi hermana Leti o unas regañás con un buen jamón, aunque tenga que mezclar hidratos (te suena Marta?? jajaja).
Otro episodio, El pelo; ¡ese gran trago!. Probablemente aquí, lo peor es «el durante». Hace tres años yo tenía el pelo largo, me acuerdo que la peluca era más cara porque la melena era de 30cm; ahora estoy ahí ahí. Tampoco sale gratis, el pelo nace distinto, al principio como encrespado (se arregla con tratamiento de estilizado) y más rizado, a mí no me salió más fuerte; también más negro y más seco. Pero ya me he hecho con «el después» . Me pongo mascarilla buena y cuando está seco unas gotitas de serum o una especie de crema tipo la hidratante de cuerpo que no lo ensucia y le da un aspecto más sano.
El durante para mi fue lo más complicado, aunque no tanto cuando estaba calva (me miraba poco al espejo, y además casi nunca tenia la cabeza al descubierto). Más bien cuando me quité la peluca. No me reconocía, salí superestilosa de la pelu pero luego tardé en hacerme con el manejo del pelo corto. Me pasé una época engominada que según mis hijos me quedaba fatal; luego ese ni corto ni largo que no te da para moñete ni coleta…Investigaba todo el rato en revistas y en la tele para copiar a las guapas de pelo corto, pero lo de parecerse a Meg Ryan es misión imposible!!! Lo bueno, que después de dos años con el pelo corto sé que no me queda mal y a lo mejor nunca hubiera hecho la prueba.
En esto he tenido suerte, las uñas, las cejas y las pestañas, tienen exactamente la misma foto «antes y después».
El vello, ese no tiene antes, ni durante. «El después» es culpa del tamoxifeno y se arregla fácilmente decolorándolo o con el hilo (lo que duele pero menudo descubrimiento!)
El pecho;¡¡¡ eso si que ha cambiado!!! También tiene sus fases y sus pros y sus contras. En mi caso el aspecto es mucho mejor en «el después» y más ahora que lo tengo toooodo, aunque sea de mentira! Con ventajas a la hora de vestir; La consistencia y la sensibilidad en cambio son un contra, más rígido y nada sensible, pero en tres años te has acostumbrado.
«El durante» también es fastidiadillo, los expansores, las expansiones, las operaciones, …pero como véis «el después» tampoco es tan malo y sobretodo es «un después» SIN CÁNCER!
El cuerpo y la cara tienen «un después» anticipado; nos hubiera llegado de todas formas pero la menopausia forzosa antes de tiempo tiene sus consecuencias. Pues sí, qué se le va a hacer, habrá que cuidarse más, echarse más potingues, maquillarse, aunque sea poco, a diario, y hacerse a la idea de que es un camino sin retorno. Importante proponerse el ejercicio regular para tonificar y así poder quedarnos un poquito en «stand by» en el camino. Y para lucir más lindas, la toallita autobronceadora una vez a la semana (cara y cuerpo), ya sabéis que soy adicta, y poco sol que envejece mogollón y provoca cáncer!
Ya solo me quedan los ojos, para mí lo más incómodo del «después»; a ver si tenéis suerte porque no es nada habitual, todavía no conozco a ninguna más de las nuestras que tenga blefaritis y reseco provocados por la quimio. Es un poco rollo, me sienta fatal el aire en movimiento, me paso el día poniéndome lágrimas,( mi marido se troncha porque me seco el pelo con gafas de sol) y se me hinchan y escaman los párpados; Se arregla con mucho aguantoformo y de vez en cuando un poquito de sombra de ojos para disimular. Al final acabo tipo celebrity todo el día con gafas de sol!!!!
Bueno, me he explayado con «Belleza», os lo debía, con un variadillo en «el después»; Ya veréis cuando le toque el turno a «Bienestar y Estilo de vida»; Seguro que coincidimos en que en la forma de afrontar la vida «después», todo son ventajas, A QUE SÍ?????